martes, 27 de mayo de 2008

"Santa" Irena Sendler (1910-2008)

Hace unos días, a sus 98 años, ha muerto "el ángel del gueto de Varsovia", como se conocía a esta mujer que salvó a más de 2.500 niños judíos de Varsovia de la persecución nazi en la segunda guerra mundial. Mujer profundamente católica, realizó su labor desde el más oscuro de los silencios, obedeciendo a su conciencia aún a riesgo de poner en riesgo su vida y la de los suyos por salvar a quienes por causa de una locura colectiva vieron peligrar sus vidas. Su posición de enfermera y sus convicciones religiosas fueron las armas pacíficas de este ángel de Dios: Sacaba vivos a los niños del hospital del gueto en ataúdes, y los repartía por todos los conventos de Varsovia. Aquellos que niegan la acción de la Iglesia para salvar vidas judías niegan la historia y la evidencia. Irena, como todas las santas, cuando era inquirida por su labor siempre respondía: "Pude salvar muchas más vidas....", y "sin la Iglesia no se donde hubiera escondido a esos niños...". 

El 20 de octubre de 1943, Irena Sendler fue detenida por la Gestapo y conducida a la prisión de Pawiak donde fue vilmente torturada. En un colchón de paja encontró una estampa de Jesús Misericordioso con la leyenda: Jesús, en vos confío, que conservó consigo hasta el año 1979, momento en que se la obsequió al Papa Juan Pablo II. Tras su tortura y su negativa a revelar nombres de colaboradores o de niños, fue sentenciada a muerte. Mientras esperaba la ejecución, un soldado alemán se la llevó para un "interrogatorio adicional". Al salir, le gritó en polaco "¡Corra!". Al día siguiente halló el nombre de este otro ángel alemán junto a la lista de los polacos ejecutados. Los niños sólo conocían a Irena sólo por su nombre clave "Jolanta". Pero años más tarde cuando su foto salió en un periódico, tras ser premiada por sus acciones humanitarias durante la guerra, comenzó a ser reconocida por aquellos a quienes había salvado la vida. Solo entonces se conoció la magnitud de su obra y llegarían los agradecimientos y los reconocimientos a su labor. En 1965 a organización Yad Vashem de Jerusalén le otorgó el título de Justa entre las Naciones y se la nombró ciudadana honoraria de Israel. En noviembre de 2003 el presidente de la República, Alexander Kwasniewsky, le otorgó la más alta distinción civil de Polonia: la Orden del Águila Blanca. En el año 2007 el gobierno de Polonia la presentó como candidata para el Premio Nobel de la Paz. Esta iniciativa fue del presidente Lech Kaczynski y contó con el apoyo oficial del Estado de Israel y de la Organización de supervivientes del Holocausto residentes en Israel. Las autoridades de Auschwitz expresaron su apoyo a esta candidatura, ya que consideraron que Irena Sendler fue uno de los últimos héroes vivos de su generación, y que demostró una fuerza, una convicción y un valor extraordinarios frente a un mal de una naturaleza extraordinaria. Finalmente el galardón fue concedido a Al Gore. Sobran los comentarios. 

Ni que decir tiene que el fallecimiento de una persona tan relevante para la humanidad ha pasado totalmente inadvertido en los medios de comunicación españoles, tremendamente sensibilizados con la cuestión de la memoria histórica, pero eso sí, únicamente mientras se trate de fosas comunes republicanas... Dicen que su vida va a ser inmortalizada en una película tipo "La Lista de Schlinder". No tendrá la repercusión mediática de ésta, ni será un éxito en taquilla, pero a buen seguro nos hará llorar a mas de uno, viendo como esta santa mujer hacía una de las cosas que más cuentan en esta vida, salvar vidas, y cómo lo hacía sin importarle edad, sexo, política, nación ni religión. 

Algún día será subida a los altares...

Descanse en paz.

2 comentarios :

  1. “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece” (Filipenses 4.13).

    Un ejemplo de Dios vivo entre nosotros, arriesgó su vida por la de los demás, de niños inocentes que ni si quieran sabian de religiones o de xenofobias, solo eran niños de padres judios.
    Una vez más, dentro del horror de las guerras donde perdemos todos, existen personas con creencias o no de Dios, pero dispuestas a hacer el Bien.
    Desconocia esta historia de Irena, que por cierto me ha conmovido y pienso que habrá mucho/as como ella que pasaron a la otra vida sin saber sus historias.
    Por cierto autentico mártir parece ser el soldado nazi.
    Lo de la memoria historica es de pena, que lastima de volver a la memoria de aquellas personas que padecieron inocentemente la miseria y ruina de la Guerra Civil. Malditan sean las Guerras y los que vivan de ellas por el motivo que sea.

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  2. ¿Cuantos santos están entregandosu vida ahora mismo en favor de los demás?, eso es lo que me pregunto mientras leia su articículo. Es un excelente artículo y no estaría mal que la Iglesia también recuperara su memoria histórica, de las personas que han ayudado a los demás abnegadamente, la unica recompensa la eternidad.

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