lunes, 6 de octubre de 2025

Annabelle: Creation (EE.UU., 2017)

Comencé a ver esta película confundido, ya que por su título creía que era la primera de Annabelle. Luego he descubierto que es la segunda que tiene como protagonista a la muñeca, y que de hecho fue la cuarta entrega del Universo Warren. Pero para mi sorpresa he acertado en el orden de visionado, ya que al estar ambientada en 1955 se sitúa como la segunda película de las once existentes hasta la época, únicamente por detrás de La Monja (ambientada en 1952). Me ha sorprendido gratamente que a pesar de alejarse del tema de los exorcismos, mantiene en gran parte el ambiente religioso en el que se desarrollan estas películas.

Con un atrayente eslogan publicitario "No conoces la verdadera historia - Peligro: no abrir", el film fue un rotundo éxito en taquilla, con 306 millones de dólares recaudados sobre un presupuesto de 15. Tuvo una acogida bastante buena de la crítica especializada, que en general la valoró de manera positiva tanto artística como argumentalmente. Ello le valió una nominación como "Mejor película de terror" en los Saturn Awards, premió que finalmente recayó sobre "Déjame salir".

A nivel técnico se producen varios cambios respecto a sus antecesoras. El director de las primeras entregas, James Wan, se convirtió en productor del film. Para sustituirlo el seleccionado fue el sueco David F. Sandberg, en el que supuso su tercer largometraje. Las estrellas de los anteriores filmes Patrick Wilson y Vera Farmiga no aparecen por primera vez en la saga, cediendo el protagonismo a Anthony LaPaglia y Miranda Otto. La música mantiene una continuidad con las anteriores a pesar de estar conducida por Benjamin Wallfisch. La canción You Are My Sunshine encaja a perfección en la trama, dotando a la película de una ambigüedad muy atractiva. A nivel argumental hay un cambio importante, pues la saga abandona la realidad (al menos la contada por el matrimonio Warren) para entrar de lleno en la ficción. 

La trama intenta entroncar este spin off con las películas de los Warren y con la futura "La monja". En 1955, la hermana Charlotte, una monja que ha tenido contacto con un convento de Rumanía, llega junto a seis huérfanas a la casa de los Mullins, un matrimonio que 12 años antes había perdido a su hija Bee atropellada por un coche. Samuel, creador de muñecas artesanas, prohíbe a las niñas entrar en el dormitorio de la difunta, pero Janice, una niña con problemas motrices desobedece esta orden. Al entrar en la habitación tendrá contacto con Bee y con su muñeca Annabelle, poseída por un espíritu maligno.

El ambiente en el que se desarrolla todo el film es, en esencia, religioso. Lo propio de una película de terror en el que la presencia del maligno contrasta con las prácticas piadosas. La casa de los Mullins parece un templo, con cruces por doquier tanto dentro como fuera de la misma. Se reza antes de las comidas y antes de ir a la cama. Una pared está empapelada con hojas de la Biblia. Aparecen rosarios, Biblias y crucifijos. 

Además, la presencia primero de un sacerdote y después de la hermana Charlotte garantizan un buen puñado de frases espirituales interesantes. Comienzo con tres oraciones, una bendición de la mesa de Samuel, otra de las dos niñas más pequeñas antes de acostarse y una última de la hermana Charlotte:

Samuel Mullins: "Dios. Gracias por permitirnos estar juntos. Y bendice estos alimentos que vamos a recibir. Ayúdanos a vivir con un corazón agradecido, y a servirte cada día. Por Jesucristo Nuestro Señor, Amén"

Linda y Janice: "Y si muero antes de despertar, que mi alma el Señor se venga a llevar. Señor, que Linda y yo encontremos un buen hogar y sigamos juntas... para que seamos hermanas de verdad. Con unos padres cariñosos, que odien los deberes tanto como nosotras. Pero, sino es así, no pasa nada. Amén"

Hermana Charlotte: "Dios mío, tu eres mi roca y mi refugio. Perdóname, Señor, perdóname"

Algo que me ha sorprendido negativamente es la escena en la que la monja confiesa a una de las niñas. No tiene ninguna base histórica ni teológica, y a pesar de ser ficción puede llevar a confusión. El final de la escena da a entender que es una confesión "falsa" o "de juego", pero este extremo no se aclara en ningún momento:

Janice: "Tengo que confesarme. Perdóneme hermana Charlotte porque he pecado. Hace..."
Hermana Charlotte: "...Al menos dos semanas"
Janice: "...Al menos dos semanas que no me confieso. Arriba hay una habitación en la que no debemos entrar"
Hermana Charlotte: "Y has entrado (...) Un pecado es un pecado sin importar las circunstancias. Y más importante aún: Bajo ningún concepto debéis desobedecer a los Mullins (...) Como penitencia, reza un Avemaría y desembala tres cajas"

Otras frases encajan en el concepto de consejos espirituales, recojo aquí dos de ellos, el último con un toque de humor propio de este tipo de películas, en el que se intenta rebajar la tensión del espectador:
 
Hermana Charlotte: "Siento mucho lo que le ocurrió a su hija. Pero nos consuela saber que la está esperando en el Cielo"
Esther Mullins: "Ojalá fuera cierto"

Hermana Charlotte: "No has de perder la esperanza. La esperanza es un refugio. Vive en él y te protegerá y te cuidará"
Janice: "¿De qué libro de la Biblia es eso?"
Hermana Charlotte: "Del libro de Charlote. Pero no por eso es menos cierto"

Y, por último, un conjunto de frases que hacen referencia a la trama principal: las posesiones diabólicas y la presencia del maligno en objetos o personas.  

Janice: "Siempre dice, que aunque no podemos ver a Dios, podemos sentir su presencia. Pues, en esta casa, siento una presencia diferente."
Hermana Charlotte: "¿De qué tipo?"
Janice: "Diabólica. Viene a por mí. Viene a por mi alma"
Hermana Charlotte: "Tu alma"
Janice: "Porque soy la más débil"
Hermana Charlotte: "No cariño. Escucha. El diablo hace presa en los débiles de fe, no en los débiles de carne y hueso. Eres tan fuerte como cualquiera de nosotras, Yanis. Más fuerte"

Esther Mullins: "Ha vuelto. Sabía que había vuelto. El demonio. El mismísimo demonio. Después de que Samuel y yo perdiéramos a nuestra hija, rezamos y le prometimos devoción a cualquier poder que nos permitiera hablar o ver a nuestra hija. El contacto empezó siendo leve... (...) Pronto nos dimos cuenta de que no era en absoluto nuestra Annabelle (...) Samuel recurrió a la Iglesia. Salvaron mi alma pero el demonio seguía estando en esa muñeca. Así que la encerramos donde pudiera estar rodeada de la Palabra de Dios"

Padre Massey: "La casa está bendecida. Cualquier demonio que hubiera ha desaparecido"
Linda: "Pero... la muñeca"
Padre Massey: "Era un canal para el demonio. Ese demonio se ha ido. Ahora la muñeca es solo una muñeca. Así que, ¿Alguna de vosotras la quiere?"

El final -no podía ser de otra manera- establece conexiones con varias películas de la saga, concretamente con Annabelle, Annabelle vuelve a casa y La Monja. Esta última algo forzada (terminados ya incluso los títulos de crédito) pero provocando en el espectador el deseo de profundizar en las historias.  

En conclusión, muy interesante para amantes de la saga y del género del terror, con un contenido teológico-espiritual bastante aceptable. A diferencia del spin off de "La monja", la trama se mantiene dentro de lo creíble y de lo sobrenaturalmente posible. Un acierto que me impulsa a ver las dos partes que me faltan de esta -de momento- trilogía.


lunes, 29 de septiembre de 2025

El Amor hecho poesía: Cantar de los Cantares

El Cantar de los Cantares es una colección de poemas de amor. Afortunadamente no todo en el Antiguo Testamento son ejércitos, guerras y pecados de las personas. También tiene cabida el amor. Un amor humano que es símbolo del Amor divino. Como dos amantes que se quieren y se desean así sucede con Dios y su pueblo. Se compone de ocho capítulos de una poesía preciosa atribuida a Salomón en los que intervienen tres personajes: El amante, la amada y el coro. No hay casi ninguna mención explícita a Dios o a lo divino, excepto en una interpretación alegórica. Por su contenido es particularmente apto para ceremonias matrimoniales, difícil encontrar -San Pablo aparte- textos tan bellos sobre el amor en la Biblia. 

De entre todas las hermosas palabras, metáforas y piropos que se dedican el amado y la amada, me quedo con unas palabras de esta última en el capítulo 8. Precisamente porque hablan de un amor que ni la muerte puede destruir, que precisamente es el que mejor define al amor divino:

Cantar de los Cantares 8,6-7:

Grábame como un sello sobre tu corazón, como un sello sobre tu brazo, porque el Amor es fuerte como la Muerte, inflexible como el Abismo es la pasión. Sus flechas son flechas de fuego, sus llamas, llamas divinas. Los océanos no podrían apagar el amor, ni los ríos anegarlo. Si alguien ofreciera todas las riquezas de su casa por el amor, sería despreciable.