Durante estos días estoy leyendo el libro de las Confesiones de San Agustín.
Su título puede llevar a engaño, ya que en principio puede parecer que el libro es una "confesión" en la que San Agustín nos abre su alma y nos narra la cantidad y el modo de los pecados que cometió durante su vida previa al cristianismo, antes de su conversión a la fe. Algo de esto encierra el volumen, y es cierto que es una especie de autobiografía, pero el núcleo esencial es otro. Se trata, más bien, de una "confesión de fe", en la que el Santo de Hipona nos intenta acercar al Dios que ha descubierto en su madurez con el paso de los años y que ha cambiado radicalmente su existencia.
Se trata, por ello, más de un tratado de espiritualidad casi mística que de unas memorias del Santo. Es un tratado filosófico-teológico, pero que no os asuste el nombre. Si os digo que son 13 libros compendiados, también os puedo desanimar, pero insisto en que no os abruméis, ya que la mayoría de ellos apenas si ocupan unas pocas páginas. Su lectura es muy asequible y divulgativa, especialmente si encontráis una buena traducción actualizada. Tengo que reconocer que hasta ahora no las había leído más que a trozos sueltos, pero que su lectura me está ayudando a intentar comprender un poco mejor al Dios cristiano a través de la experiencia vital de uno de los mayores Santos de la Historia.
Simplemente el comienzo ya es un clásico y una de las frases más utilizadas cuando se cita a San Agustín: “Nos hiciste, Señor, para Ti, y nuestro corazón está inquieto, hasta que descanse en Ti” (Conf. I,1,).
Así que mi consejo es que os animéis y lo leáis. Son muchas las cosas que se pueden leer en la oferta cultural de hoy en día, pero los clásicos siempre van a estar ahí. Os dejo dándoos el mismo sabio consejo que una vez me dieron a mi: "Lee mucho, pero comienza leyendo los libros importantes, ya que no podrás leerlos todos..."
Comencè a leerlo, pero hay que hacerlo lentamente, para ir asimilando e interpretando con silencio exterior e interior. Es bellìsimo. Publiquè hace mucho pàrrafos de la primera parte.. Lo retomarè. Es un teòlogo por excelencia, como Santo Tomàs de Aquino..
ResponderEliminarUn doctor de la Iglesia nunca defrauda.
ResponderEliminarConoci su historia por medio de un Sacerdote y desde entonces he leido libros de el Pecador y DOCTOR DE LA IGLESIA SANTO QUE GRANDE ES DIOS Y COMO NOS LLAMA Y QUE GRANDE ES SU AMOR el sacerdote es mi confesor y mi guia Espiritual saludos desde España
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