lunes, 29 de marzo de 2021

La Biblia... En su principio (The Bible: In the Beginning... , EE.UU., 1966)

Esta Semana Santa tan atípica en la que estamos inmersos debido a la pandemia se me ha presentado como una ocasión única para dedicar tiempo a visualizar nuevas películas de contenido religioso que en estos días proliferan en la programación televisiva. La primera de ellas fue este clásico de John Huston de 1966. 

La Biblia... En su principio es una superproducción bíblica fiel reflejo de los primeros 22 capítulos del libro del Génesis, con seis historias más o menos individuales pero interdependientes. La literalidad de los textos es seguida casi al pie de la letra, salvo algunas partes que se omiten (en especial los largos listados de genealogías del texto bíblico). De cada una de estas seis partes ofrezco una pincelada de mis apreciaciones:

La Creación (Gn, 1-2)

Formada por dos relatos, ambos se integran en la película. El relato de los siete días de la creación (donde destaca la expresión repetitiva "Y vio Dios que todo era bueno") y el segundo relato de la creación del jardín del Edén y del hombre y de la mujer, Adán y Eva. A nivel cinematográfico es prácticamente un documental sobre la naturaleza (no podía ser de otro modo), con diálogos escuetos en los que se privilegia el deleite visual producido por la belleza de lo creado.

El pecado original (Gn 3)

Me parece muy acertado el acercamiento neutro que ofrece el film, ya que frente a quienes quieren ver en el primer pecado algo relacionado con la sexualidad (vista de esta manera como algo negativo), el texto solo nos ofrece la certeza de la desobediencia al mandato divino de no comer el fruto del árbol de la Ciencia del bien y del mal. La tentación del demonio, y el orden bíblico son respetados, apareciendo el pudor de la desnudez como algo posterior y no previo al pecado. Los castigos a los responsables (serpiente, Eva y Adán) son los mismos que los textos bíblicos, si bien se omite una representación visual de este versículo: "puso al oriente del jardín de Edén a los querubines y la llama de la espada zigzagueante, para custodiar el acceso al árbol de la vida".

Caín y Abel (Gn 4)

En un ambiente de pocas palabras se nos narra el segundo pecado, el fratricidio debido a la envidia de Caín hacía su hermano Abel. De nuevo hay una fidelidad casi absoluta al relato veterotestamentario, si bien de nuevo echo en falta una frase con la que Dios reprimenda el comportamiento de Caín antes del homicidio y que creo que podría haber dado juego: "Si obras bien podrás mantenerla erguida (la cabeza); si obras mal, el pecado está agazapado a la puerta y te acecha, pero tú debes dominarlo». 

El arca de Noé (Gn 5-9)

Uno de los episodios más agradecidos por lo vistoso de las apariciones en escena de múltiples animales. No debió ser fácil el rodaje de esta parte debido a lo precario de los efectos especiales de la época, lo que lo hace más interesante aún. Es un episodio tan atractivo que hace unos años dio lugar a un largometraje "made in Hollywood" solo para la historia del arca, y ya comentado en este BlogNoé. precisamente destacar que se han omitido en este film dos elementos que sí aparecen en la versión moderna: el tema de los gigantes que poblaban la tierra y la embriaguez de Noé

La Torre de Babel (Gn. 10-11)

Me llamó la atención en el visionado el podo tiempo que se le concede (apenas 15 minutos), siendo un tema también visualmente atractivo. Es cierto que en la Biblia (genealogías aparte) este episodio solo ocupa 9 versículos, motivo por el cual creo que nadie se atreve a versionar la historia de una manera más larga. No obstante, creo que es un tema que podría dar lugar  una revisión más extensa.

Abraham (Gn. 10-22)

El film termina con la historia de Abraham, en este caso de manera más detallada (la parte más larga de las seis del film), incluyendo la destrucción de Sodoma y Gomorra. Esta historia siempre me ha parecido la parte más oscura del Antiguo Testamento, con el peligro de transmitir la visión de un Dios "sádico" que exige a Abraham que sacrifique a su único hijo Isaac. Creo que una lectura adecuada del relato tiene que tener en cuenta dos elementos:

- En primer lugar, lo que Dios pide a Abraham es que confíe en él aunque le pida algo que conlleva un imposible. Si Abraham es ya anciano y Dios le pide que mate a su único hijo, ¿Cómo va a cumplir Yahvé su promesa?. Abraham entiende que no le toca a él responder a esa pregunta, sino obedecer y punto. Es por ello que se gana el título de "nuestro padre en la fe" para las tres religiones monoteístas, judaísmo, cristianismo e Islam. 

- En segundo momento, la relectura más preciosa que se puede hacer de este texto a la luz del Nuevo Testamento nos la ofrece San Pablo en su Carta a los Romanos 8, 32. "El que no escatimó a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿no nos concederá con él toda clase de favores?". La visión de un Dios que sacrifica a su propio Hijo por nuestra salvación (lo que no permite que haga Abraham) es estremecedora. 

En definitiva, una película perfecta para conocer mejor el primer libro de la Biblia, y a pesar de que los años no pasan en balde, al tratarse de una temática casi atemporal el visionado de la misma es bastante entretenido y no se hace pesado, a pesar de su 170 minutos de duración. 

miércoles, 3 de marzo de 2021

La Aparición (L'apparition, Francia, 2018)

Es curioso que La Aparición es la cuarta película sobre apariciones marianas que he visto y comentado en un corto periodo de tiempo, siendo todas ellas además muy distintas entre sí. Tierra de María la podemos encuadrar como de un documental religioso sobre las apariciones aunque con formato de largometraje, Garabandal es un film bienintencionado pero de bajo presupuesto con actores inexpertos y Lourdes es un film con un presupuesto y un guion elevados, pero la temática es más bien una crítica satírica del fenómeno de las apariciones, sin entrar en la profundidad que merece este tema.

La película francesa que hoy comento, La Aparición (2018) podría bien ser una buena síntesis de todas ellas. Es un largometraje que trata en profundidad y con seriedad el tema de las apariciones, teniendo un director experto (Xavier Giannoli) y actores contrastados como Vincent Lindon y la novel Galatea Bellugi (nominada por este trabajo a la mejor actriz revelación en los Premios César).

El argumento es el siguiente: Jacques es un periodista de guerra que se encuentra de baja porque acaba de perder a su compañero en una misión. La Congregación de la Doctrina de la Fe vaticana le encarga la investigación de unas supuestas apariciones en Francia. Anna, de 18 años, es la vidente de esas supuestas apariciones y en torno a su ciudad están acudiendo multitud de peregrinaciones. Jacques se incorpora a la comisión de investigación e irá desentramando la verdad, verificando que nada resulta ser lo que parece en un principio.

Aunque por el realismo, el rigor y lo bien documentado que está el proceso de investigación puede parecer que está basada en hechos reales, lo cierto es que en realidad se trata de un thriller con connotaciones religiosas que te mantiene atrapado en la trama desde el principio hasta el final. Lejos de temas más manidos como el fundamentalismo religioso o los escándalos eclesiales, el film es un intento bastante sugerente de adentrarse en el mundo interior de los diferentes protagonistas, algo que no abunda en la cinematografía actual. 

Precisamente por ello, creo que la mejor manera de comentar la película -sin ser demasiado spoiler- es la de analizar cada personaje por separado, ya que aparecen bastante estereotipados sobre las diferentes posturas que podemos encontrar acerca de las apariciones. 

Jacques Mayano: Periodista que experimenta una catarsis interior a lo largo de la película. Es ajeno a la vida clerical y a sus vericuetos, por lo que se siente extraño y diferente a los demás, fascinado por lo que está pasando pero a la vez receloso por sus convicciones racionalistas. A través de una honesta búsqueda íntima y personal, va a pasar de centrarse en la búsqueda de pruebas tangibles a entender y valorar lo subjetivo de cada experiencia religiosa. No se trata de un camino fácil y tendrá que ahondar en el resto de personas y situaciones para quitar la "hojarasca" y penetrar en el "meollo" de los corazones.

Anna: Vidente de 18 años de la que la película nos ofrece una visión de la profunda sinceridad de su fe, con continuas penitencias, mortificaciones y oraciones. Inseparable de su rosario, entiende que está sacrificando su vida por la divulgación del mensaje divino. Algunos se aprovechan de ella, otros la creen ciegamente, otros dudan pero se inclinan a creer que es real.... Sus miradas y su complicidad con el Padre Borrodine y con Anton Meyer, sin embargo, hacen que uno mantenga la suspicacia durante todo el film, sin saber si aquello que dice Anna es verdadero o no. 

Padre Borrodine: Es el sacerdote protector de Anna, quien reconoce que al principio no la creía y luego sí. También parece ocultar algo, y da la impresión de querer manipular a Anna, o incluso tener un romance con ella. Es receloso de las autoridades vaticanas y del proceso de investigación, lo que no dice mucho en su favor. 

Anton Meyer: Es un sacerdote alemán que se está encargado de la divulgación del proceso a su país y a otras potencias como EEUU. Desde el principio es el personaje más oscuro, pues antepone la propaganda (y sus beneficios económicos) a la supuesta verdad de las apariciones. Es sin duda, el personaje más siniestro y manipulador de toda la trama, aquel que tiene un fin y haría lo que fuera por llevarlo a cabo hasta el final.   

La doctora De Villeneuve, el Padre Gallois, el Padre Ezeradot y Stephan Mornay. Son los otro cuatro miembros de la Comisión. Psiquiatra, teólogo, representante de la Diócesis y secretario -respectivamente- representan a aquellos que viven "un día más en la oficina". En general son presentados como aquellos que creen que lo saben todo, que ya han visto situaciones como esta en otros casos similares y por ello tratan el asunto con ligereza, casi con "frivolidad", no esperando que nada nuevo les sorprenda. Me parece una intuición muy válida ya que parece una actitud muy generalizada en parte de la curia que se sienten superiores al resto de los mortales y que ni siquiera dejan que Dios los sorprenda en su vida. No obstante es presentada como una actitud lógica en aquellos que están acostumbrados por su trabajo a desenmascarar falsas apariciones y montajes de todo tipo. Me recuerda enormemente al personaje de Ed Harris en la película El Tercer Milagro, en la que es llamado "El asesino de los milagros", trabajo que le ha conducido a una profunda crisis vocacional. 

A través de la mirada de todos estos personajes vamos viendo la investigación canónica en la que poco parece importar la decisión final, sino la evolución interior de cada uno de los personajes. A lo largo de la investigación aparecerán tres elementos que parecen ser la clave de todo. Una síndone con sangre humana, un extraño icono con un agujero de bala y una muchacha que ha desaparecido, Marianne, íntima amiga de Anna. Me temo que tendréis que ver la película para ver cómo encajan todos estos elementos hasta la resolución del caso. Una frase me impactó sobremanera en los diálogos de la misma, acerca de lo minucioso de la investigación y lo precavida que es la jerarquía en estos temas: "La Iglesia prefiere dejar pasar un fenómeno verdadero antes que validar un engaño". Mencionar por último que me encantó la BSO de la película, con composiciones de Arvo Pärt (la música del cual sirvió de inspiración para el director), George Delerue, Claudio Monteverdi y Jóhann Jóhannsson, que acompañan a la perfección los elementos humanos y divinos de la historia.

Espero que la disfrutéis tanto como yo.