lunes, 27 de febrero de 2023

Una historia verdadera de perdón ideal para Cuaresma

Ayer escuche por primera vez el impactante testimonio del protagonista de una impactante historia ocurrida en 1999 en
Kansas City (EE.UU.) que pone los pelos de punta. Tan es así que me parece una excelente historia para un guion cinematográfico, del que no tengo constancia que se haya realizado hasta el momento. Esta historia tan macabra, pero a la vez tan bonita sobre el perdón hubiera encajado perfectamente en la ya comentada aquí El mayor regalo de Juanma Cotelo, aunque en este caso sus protagonistas no son católicos sino perteneciente a la Iglesia Baptista de América. 

Aunque sea larga, hay que comenzar por contar la historia detalladamente. El drama comenzó el viernes 5 de noviembre de 1999 en Oskaloosa, un pequeño pueblo cercano a Kansas. La joven de 14 años Zetta Camille Arfmann vive con su madre y la pareja de esta, Floyd Bledsoe. Un día, a la vuelta del colegio, a Camille se le pierde la pista. Al no aparecer al servicio religioso al que acudía puntualmente junto al resto de jóvenes del pueblo, sus padres comienzan a preocuparse. Tras avisar a la policía y comenzar el rastreo, el pastor de la Iglesia recibe en el contestador de su teléfono un mensaje de Tom Bledsoe, un joven poco social y solitario hermano de Floyd“Sé dónde está (Camille). Cuando recibas este mensaje, me entregaré al departamento de policía. No sabes el dolor que pasé mientras me sentaba a pensar. Desearía no haberlo hecho nunca... Pagaré el resto de mi vida por lo que he hecho”. Tom realiza una segunda llamada al Pastor tras hablar con sus padres: “Todo lo que puedo pedir es perdón por lo que he hecho. Pagaré el resto de mi vida por lo que he hecho”. Tras ello, acude a la policía y entrega una pistola de balas de 9 milímetros con las palabras: "Lo hice. La maté". Tom llevó a la policía al lugar donde se encontró el cadáver de Camille, quemada semidesnuda tras haber recibido cuatro disparos, aunque sin aparentes signos de haber sido violada. 

Tras ser encarcelado preventivamente, Tom cambia su versión tras un encuentro con su abogado, diciendo que el verdadero asesino es su hermano Floyd, quien lo había amenazado con revelar secretos sexuales de zoofilia. La mujer de Floyd y madre de Camille dio credibilidad a esta acusación añadiendo que recordaba que en varias ocasiones Floyd le había hablado de manera extraña de la belleza de su hija. 

Tras acusaciones cruzadas entre uno y otro hermano, se produce un juicio en el que se intenta dilucidar cuál de los dos es el culpable. El padre de ambos testifica en favor de Tom, diciendo que aquella tarde estuvo con ellos en una subasta y por lo tanto no podía ser el asesino. Cody, la hija de dos años de Floyd y Heidy (la madre de Camille) testificó de manera privada ante el juez diciendo que Tom le había contado cómo había matado a Camille. Tres días más tarde, mantuvo que esa conversación era real, pero que dicha conversación fue con "papi". Algunos testigos dieron testimonio de que Floyd tampoco podía haber sido el asesino, pues había estado todo el día trabajando en la granja siendo visto por muchos de ellos.

Finalmente, el 28 de abril de 2000, el jurado condenó a Floyd por asesinato en primer grado, con el agravante de secuestro y abuso de un menor. Fue condenado a cadena perpetua. Su caso fue revisado en 2004 y 2007 por falta de pruebas y mala praxis de su abogado defensor, pero en ambos casos las enmiendas fueron rechazadas. 

En el año 2.012, un estudiante reabre el caso ante la llegada a la medicina forense de las pruebas de ADN. En 2014 consigue contrastar pruebas de secreción vaginal de Camille y de la ropa que llevaba cuando fue encontrada. Los resultados no dejaron lugar a la duda. El ADN encontrado correspondía con el de Tom, incluso en la ropa se encontraron posteriormente restos de ADN de su padre, quien probablemente lo había ayudado a ocultar el cadáver 

En octubre de 2015 se solicita de nuevo la revisión del caso. El 9 de noviembre de 2015 Tom se suicida dejando una nota en la que reconocía haber violado y asesinado a Camille: “Floyd es inocente. Decidle a Floyd que lo siento. Mi abogado me obligó a ello. Violé y asesiné a una niña de 14 años. Además envié a un hombre inocente a prisión”. Para asegurar que en esta ocasión decía la verdad, añadió el lugar donde había enterrado los 4 casquillos de las balas utilizadas, que la policía encontró con un detector de metales poco después en el lugar indicado. 

El 15 de diciembre de 2015 Floyd fue puesto en libertad. En 2019 el Estado de Kansas lo indemnizó con un millón de dólares por los más de 15 años de privación de libertad.

Hasta aquí la parte macabra o morbosa del caso. Como dije al principio un guion perfecto para una película de intriga, suspense y acción judicial. Pero lo bonito del caso es escuchar en primera persona el testimonio de Floyd Bledsoe. Criado en un ambiente religioso, narra como tras la ira y el rechazo inicial a su padre y a su hermano poco a poco este sentimiento se fue transformando en un perdón sincero y de corazón, gracias a la intervención del capellán Don Starnes y al programa de reinserción Freedom Challenge." No era una tarea fácil, perdonar a un hermano traidor y a unos padres que se ponen de parte de un hermano para protegerlo aún a costa de marginar al otro. Al poco de entrar en la cárcel, sus padres dejaron de hablarle, su esposa se divorció de él y sus dos hijos pequeños lo olvidaron. Sus mejores amigos aceptaron su culpabilidad y nunca recibió una visita de ninguno de ellos. 

Floyd comenta que en su iglesia había escuchado muchas veces hablar del perdón de Dios y que lo conocía teóricamente, pero de ahí a practicarlo hay un abismo. “Mi fe era lo único que me quedaba, lo único que no me podían quitar”. En aquellos años duros sabía que por alguna razón que a él se le escapaba los planes de Dios pasaban por soportar esa injusticia. “En la cárcel aprendí a apoyarme en Dios y Él se me fue revelando durante esos 16 años”. En el silencio y la oscuridad de su celda tuvo mucho tiempo para pensar en el perdón, del que ha sacado esta conclusión: “El perdón es más beneficioso para la parte ofendida. Perdonar es liberar al ofendido y devolverle lo que le ha sido arrebatado. Hoy perdono de todo corazón a mi padre y hermano, y mi única pena es no poder hacerlo personalmente con mi hermano, lo que espero hacer en la otra vida”. El rencor, la ira y el odio no hacen sino ofuscar más a quien sufre una injusticia. Ello no quita el sufrimiento, pues aún a día de hoy lamenta el tiempo perdido, especialmente con sus hijos: “Nos llevamos bien, pero es un tipo de relación diferente a lo normal. Nunca será lo que podría haber sido. Todavía hay problemas por resolver”.

En la actualidad Floyd acude diariamente al Mount Olivet Worship Center, una iglesia pentecostal en Hutchinson, desde la que acude cinco días por semana a la prisión, pero en este caso de manera voluntaria, para enseñar verdades espirituales a quienes carecen de libertad y a quienes quiere ayudar para que se reinserten una vez que sean liberados. “Mi esperanza es compartir el evangelio y dejar que otros sepan que sus vidas pueden cambiar como cambió radicalmente la mía”.

Un testimonio verdaderamente impactante. Un último apunte inquietante: ¿Qué hubiera sido de Floyd si en lugar de haber sido condenado a cadena perpetua hubiera sido reo de pena de muerte? Su caso, es sin duda, un paradigma de la defensa de la abolición de esta práctica, puesto que como le sucedió a él, la justicia no es infalible...

miércoles, 22 de febrero de 2023

Miércoles de Ceniza y Cuaresma

Comenzamos una nueva Cuaresma y como en estos últimos años hago un alto en las publicaciones cinematográficas para compartir una pequeña reflexión sobre este tiempo litúrgico que cada año nos invita a la conversión y a la penitencia. Si ello termina con acercarnos al sacramento de la Penitencia y a vivir con intensidad la Semana Santa y la Pascua (la Cuaresma no es un fin en sí misma, sino un medio para santificar esos tiempos fuertes) el objetivo de estos 40 días de "desierto" espiritual estará más que cubierto.

El otro día, en la homilía de mi hermano Luis (del que me hice portavoz mediático durante el confinamiento del año 2020), encontré muy sugerente una comparación en la que no había caído hasta ahora. Existe un claro paralelismo (él nos lo ilustró y nos lo hizo ver) entre el ayuno, la limosna y la oración y las tentaciones que sufrió Nuestro Señor en el desierto, así como en los tres votos de la vida contemplativa.

Vamos por partes. El "Ayuno" es en un primer momento la privación del alimento, aunque modernamente se nos invite a prescindir de cualquier otro elemento que nos distraiga de nuestra vida espiritual. Puede ser ayunar de la tecnología, del móvil, de la tv, de la siesta o de cualquier cosa que se nos ocurra. Es cierto que la primera tentación de Cristo fue la de convertir las piedras en panes para saciar su apetito tras 40 días sin probar bocado. Pero lo que literalmente es "no comer" simbólicamente lo podemos aplicar a privarnos de algo. Haciendo el paralelismo con la vida religiosa, en ella uno ayuna de por vida con el voto de castidad de las relaciones genitales que conlleva la sexualidad. Los cristianos de a pie estamos también llamados a buscarnos nuestro propio ayuno de algo que sin ser malo (igual que el sexo de por sí mismo no lo es) puede en su abuso estar distrayéndonos de lo realmente importante, nuestra configuración con Cristo a la que somos llamados en el Bautismo

La "Limosna" es dar de lo que tenemos, no de lo que nos sobra. La limosna -íntimamente unida a la caridad- habla de pobreza, pero no de aquella pobreza impuesta por la escasez de recursos o por las malas condiciones socio-económicas, sino de una pobreza elegida por aquel que lo deja todo para el seguimiento de Jesucristo: "Una sola cosa te falta: anda, vende todo lo que tienes y dáselo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo. Luego ven y sígueme". (Mc. 10, 21). Precisamente el voto de pobreza que realizan todos los que abrazan la vida monástica o conventual tiene esa función, la renuncia de los bienes materiales por una elección de los bienes celestiales y espirituales. Volviendo al relato de las tentaciones, esa es también la renuncia al tercer intento con el que Satanás tienta a Jesucristo, el de postrarse ante él y adorarlo a cambio de todos los reinos y riquezas de este mundo. 

La "Oración", por último, es nuestro diálogo con Dios, un diálogo en el que "el hombre propone y Dios dispone", como dice el refranero popular. Una oración no hecha a nuestra medida (sería falsa), sino abierta al cumplimiento de la voluntad de Dios en nuestras vidas. Una oración que acepta el sufrimiento redentor como parte de esos misteriosos designios del Padre. En el episodio de las tentaciones, Jesús renuncia a tirarse del alero del Templo de Jerusalén y ser recogido por unos ángeles que lo sostengan porque esa no es la voluntad de Dios que Él ha descubierto en su oración en el desierto. Los planes de Dios no pasaban por un Mesías triunfante y espectacular sino por el humilde Siervo de Yahvé que muere en la cruz para redimir al mundo, un espectáculo denigrante e increíble para los que no tienen fe ("¡Si eres el Hijo de Dios, baja de la cruz y entonces creeremos en ti!" Mt. 27, 40) pero esencial, como dice San Pablo, para el mensaje cristiano: "Me propuse más bien, estando entre ustedes, no hablar de cosa alguna, excepto de Jesucristo, y de este crucificado" (Primera Corintios 2,2). En la vida religiosa esa promesa se hace a través del voto de obediencia, en la que el consagrado cree que la voluntad de Dios hay que aceptarla a través de los superiores, negándose uno a sí mismo y a sus propias ideas. En ese sentido la voluntad de Dios se plasma de manera práctica en la opinión del superior que debe anteponerse al criterio de quien se somete a él. 

Tres elementos, tres prácticas, tres armas que nos propone la Iglesia un año más para que luchemos contra las tentaciones del materialismo, del egocentrismo o de lo que nos distrae de lo verdaderamente importante, el Reino de Dios y su cumplimiento en nuestras vidas.

lunes, 20 de febrero de 2023

La ley del silencio (On the Waterfront, EE.UU., 1954)

La película de Elia Kazan que hoy comentamos no es en esencia religiosa, no obstante, el papel del sacerdote que aparece como uno de los protagonistas secundarios se me antoja fundamental para una correcta comprensión de la misma. Mi comentario irá especialmente destinado a subrayar su intervención y sus frases, que no tienen en absoluto desperdicio. Una figura que a pesar de ser ficticia está inspirada en un sacerdote real, John M. Corridan (1911-1984), sacerdote jesuita que luchó incansablemente contra el crimen organizado en los muelles de Nueva York

Con un reparto de auténtico lujo (Marlon BrandoEva Marie SaintKarl Malden...) la cinta se hizo acreedora de 8 Oscars, incluyendo mejor película, director, actor (Marlon Brando) mejor actriz secundaria (Eva Marie Saint), así como 4 Globos de Oro: incluyendo Mejor película dramática. Pocas películas han puesto tan unánimemente de acuerdo a ambos jurados por lo que estamos ante un auténtico clásico del cine negro. 

Su argumento se centra en los muelles de Nueva York. Allí, los estibadores están sometidos a los sindicatos mafiosos. Terry Malloy (Marlon Brando) es un boxeador que tras sus fracasos en el deporte intentar rehacer su vida como matón, hasta que al enamorarse de Edie Doyle (Eva Marie Saint) -cuyo hermano ha sido asesinado por el sindicato- decide poner punto y final a esa vida y destapar la trama, con la ayuda depadre Barry (Karl Malden).

Como dije anteriormente la figura que me interesa para este comentario es la del padre Barry, un sacerdote que va a salir de su vida acomodada para denunciar las injusticias que sufren los trabajadores, arriesgando para ello su vida y las de los que le rodean. Metafóricamente y como se insinúa en el film, el Padre Barry toma partido en una batalla desigual entre "halcones" y "palomas"

Su primera intervención es ante el cadáver de Joey, el hermano de Edie, con este diálogo en el que la hermana del difunto le reprocha su tibieza y el no tomar partido en una situación en la que claramente no se puede ser tibio pues hay victimas y verdugos:

Padre Barry: "Tómatelo con calma, Pop. Sé que es duro, pero el tiempo y la fe lo curan todo... ".
Edie: "El tiempo y la fe... Mi hermano está muerto y usted se queda ahí hablando tonterías sobre el tiempo y la fe".
P.B.: "Porqué Edie, yo..."
E.: "¿Cómo podría alguien hacerle esto a Joey? Lo mejor del barrio... Lo decían todos, no solo yo. ¿Quién querría hacerle daño a Joey? ¿Dime quien?, ¿quién?"
P.B.: "Ojalá lo supiera, Edie, pero..."
E.: "¡No te alejes! ¡Míralo! Tú también estás en esto, ¿No lo ves, no lo ves? Usted también está en esto, padre".
P.B. "Edie, hago lo que puedo. Estoy en la iglesia cuando me necesites".
E.: "En la iglesia cuando me necesitas". ¿Hubo alguna vez un santo que se escondiera en la Iglesia?".

La segunda vez que aparece el sacerdote es ya para tomar cartas en el asunto e intentar resolver el conflicto. El sindicato solo contrata en el muelle a quienes callan por estar amedrentados, y el Padre Barry va a intentar cambiar ese status quo convocando una reunión en su iglesia entre los más rebeldes e inconformistas:

Padre Barry: "¿Y no hay nada que podáis hacer? ¿Qué tal vuestro sindicato?" 
Moose: "Ya sabe cómo funciona el negocio local, padre. Levántate en una reunión, haz una moción, las luces se apagan, tú te apagas". 
Tommy: "Si tres chicos hablan en una esquina, los chicos de Johnny... (echa un vistazo cuidadoso a su alrededor.)... los chicos nos separan." 
P.B.: "¿No se deshicieron de esto hace años los mineros, los marineros, los trabajadores de la confección? (después de una pausa significativa) El fondo de la iglesia".

Llegamos así a la celebración de la reunión clandestina en los sótanos de la iglesia, que comienza con este interesante discurso del Padre, que no parece encontrar mucha respuesta del auditorio:

Padre Barry: "Pensé que habría más de vosotros aquí, pero los romanos descubrieron lo que un puñado de personas pueden hacer, si el puñado es el correcto. Y lo mismo sucede con vosotros y la mafia que tiene su pie en vuestro cuello. Os conformáis con lo que hay pero, la situación es tan simple como uno-dos-tres. Uno: Las condiciones de trabajo son malas. Dos: Son malas porque la mafia hace la contratación. Tres: La única forma de acabar con la mafia es detenerla. No dejarlos salirse con la suya con el asesinato. (Mira a su alrededor ellos. Todos son en silencio, esperando.) Si solo uno de ustedes respondiera una pregunta, tendríamos un comienzo. ¿Quién mato a Joey Doley?"
Silencio 
"Tengo el presentimiento de que cada uno de ustedes podría decirnos algo al respecto".
Silencio 
"Entonces responded a esta otra pregunta: ¿Cómo podemos llamarnos cristianos y proteger a estos asesinos con nuestro silencio?" 
Silencio 
"Toma asiento (a Terry, que acaba de llegar). Estoy tratando de averiguar justo lo que le pasó a Joey Doyle. Tal vez puedas ayudar. Ahora escuchad, si sabéis quienes son los pistoleros, si los veis en el muelle todos los días, ¿Vais a quedaros quietos hasta que os maten, uno a uno?"
Nolan: "Padre, tiene que comprender una cosa. En el muelle siempre hemos sido S y M".
F.B.: "¿S y M?"
N.: "Sordos y mudos. Puede pasar algo justo en frente de nuestras narices y nosotros no vemos nada. Sabe lo que quiero decir. No importa cuánto odiemos al tipo que no lo delatamos".
P.B. "Chicos, sed inteligentes. Sé que es arriesgado pero una cosa tenemos en este país, una forma de contraatacar. Divulgar los hechos para el público. Testificar lo que sabéis que es correcto contra lo que sabéis que está mal. Lo que les delatará es decir la verdad. ¿no podéis ver eso?" 
Padre Vicent: "Esto parece ser casi todo lo que se puede hacer en este momento, creo que estamos de acuerdo, padre, y por eso me gustaría terminar con unas palabras de San Pablo, "Venid a mí...".

En se momento irrumpen los matones en la reunión para disolverla, aunque tras el tumulto el Padre Barry consigue que Kayo Nolan, uno de los cabecillas, se enganche en su causa

P.B. "¿Pero aún sigues pidiendo silencio?, ¿Aún lo llamas delatar?" 
N. "¿Está usted conmigo, padre?" 
P.B.: "¿Qué crees?" 
N.: "Si me lanzo y me cortan el cuello, ¿sería ese el final? ¿O está listo para ir hasta el final?" 
P.B.: "Seguiré adelante, Kayo, créeme". 
N.: "Le apretarán, con alzacuellos o sin él"
P.B.: "Y sigo diciendo que te levantes y yo me levantaré contigo". 
N.: ¿Hasta el final?" 
P.B.: "¡Ayúdame Dios!" 
N.: "Bueno, me divertí, bebí hasta hartarme y jugué con algunas potrancas guapas. Estoy aburrido". 
P.B.: "Estamos en marcha, Kayo".

Tras la muerte de Cayo Nolan, aplastado por un contenedor del cargamento que se cae "accidentalmente" sobre él, el sacerdote no ceja en su empeño, logrando que sea el protagonista principal del film, Terry, el que siga adelante con la revolución, pasando de ser un matón al hombre que plante cara a la banda mafiosa. no es una tarea sencilla, sino llena de dudas y temores. Un proceso lento y costoso, favorecido por discursos-homilías como estos:

Padre Barry: "Vine aquí para cumplir una promesa. Le di a Kayo mi palabra de que si se enfrentaba a la mafia yo lo apoyaría hasta el final. Ahora Kayo Nolan está muerto. Era uno de esos tipos que tenían el don de levantarse, pero esta vez lo despacharon bien, a menos que fuera un accidente como dice Big Mac. Algunas personas piensan que la Crucifixión solo tuvo lugar en el Calvario. Será mejor que piensen de otra manera. Quitarle la vida a Joey Doyle para evitar que testifique es una crucifixión. Tirar un fardo sobre Kayo Nolan porque estaba listo para contarlo todo mañana eso es una crucifixión. Cada vez que la mafia aplasta a un buen hombre, trata de impedir que cumpla con su deber como ciudadano, es una crucifixión. Y cualquiera que se sienta y deja que suceda, guarda silencio sobre algo que sabe que sucedió, comparte la culpa. Tanta como el soldado romano que traspasó la carne de Nuestro Señor para ver si estaba muerto. (mirando hacia el camión y señalando el barco) Muchachos, esta es mi iglesia. Si no creéis que Cristo está aquí en el muelle, tenéis otra manera de ver las cosas. ¿Y con quién creéis que os alineáis?.... Cada mañana, cuando el jefe de contrataciones hace sonar su silbato, Jesús está a vuestro lado en la fila. Él sabe porqué algunos de vosotros son elegidos y otros pasados por alto. Ve a los padres de familia preocupados por pagar el alquiler y conseguir comida en la casa para la esposa y los niños. Él los ve vendiendo sus almas a la mafia por el jornal de un día... ¿Qué piensa Cristo de los muchachos de dinero fácil que no hacen nada del trabajo y se llevan toda la pasta? ¿Qué piensa Él de estos tipos que visten trajes de ciento cincuenta dólares y anillos de diamantes, sobre sus cuotas sindicales y el dinero de sus sobornos? ¿Cómo se siente Él acerca de los chupasangres que se llevan la ganancia del trabajo de un estibador y se quedan con el veinte por ciento de interés al final de una semana?, ¿Cómo se siente Él, que habló sin temor contra el mal, acerca de su silencio?..... ¿Queréis saber qué le pasa a nuestro muelle? Es el amor de un mísero dólar. Es amar a un dólar, al trabajo cómodo, más que amar al hombre. Es olvidar que todo hombre aquí abajo es su hermano en Cristo. Pero recuerden, compañeros, Cristo siempre está con vosotros. Cristo está en aquí, está en el muelle. Él está en la sala del sindicato. Está arrodillado aquí al lado de Nolan y está diciendo con todos ustedes— ¡Si lo hacen con el más pequeño de los míos, me lo hacen a mí! Lo que le hicieron a Joey, lo que le hicieron a Nolan, te lo están haciendo a ti. Y tú. Y tú. ¡Y solo tú, con la ayuda de Dios, tienes el poder de acabar con ellos para siempre! (se vuelve hacia el cadáver de Nolan) ¿Está bien, Kayo? (entonces mira hacia arriba y dice, con dureza) Amén". 

Terry, enamorado hasta más no poder de Edie, decide dar un paso más y enfrentarse a la banda mafiosa. Una nueva conversación con el sacerdote es la clave para ese cambio o metanoia en su vida, al contar todo lo que sucede no en una confesión, sino en una charla amistosa:

Padre Barry: "Algún otro sacerdote te puede confesar".  
Terry: (siguiéndolo) "Pero es a ti a quien se lo quiero contar... lo que dijiste sobre Nolan... sobre guardar silencio cuando sabes la situación... Soy culpable... ¿me oyes? Soy culpable..." 
P.B.: (tratando de seguir adelante) "No quiero oírlo allí" (en el confesionario)
T.: "¡No lo entiendo!" 
P.B.: "Dímelo ahí dentro (el confesionario) y se me sellan los labios. Pero si lo descubro yo mismo, puedo usarlo donde sea mejor". 
T.: "Pero tienes que escucharme". 
P.B.: "Te encontraré un sacerdote". (El padre Barry comienza a andar de nuevo. Terry lo sigue desesperadamente, agarra al Padre por el brazo con fiereza, lo gira)
T.: "Escucha, fui yo quien tendió una trampa a Joey Doyle para los matones. (El padre Barry se detiene y lo mira fijamente, dándose cuenta de que Terry está listo por fin)
P.B.: "Ven a dar un paseo conmigo, chico, y cuéntamelo bien. No hay nada que no haya escuchado." 

Acudir a la citación ante el juez no es una decisión fácil de tomar, pues Terry debe delatar a sus antiguos amigos, a los amigos de su madre y a su propio hermano. El sacerdote no lo presiona, sino que deja que sea su propia conciencia la que tome esa decisión: 

Padre Barry: "¿Cuánto valdrá tu alma si no lo haces? (testificar). Escucha, no te estoy pidiendo que hagas nada, Terry. Es tu propia conciencia la que tiene que hacerse esa pregunta. 
Terry: "Conciencia... (sacude la cabeza con tristeza) Ni siquiera sabía que tenía una hasta que te conocí a ti ya Edie... Este asunto de la conciencia puede volverte loco." 
P.B.: "Buena suerte". 
T.: "¿Es todo lo que tienes que decirme, padre?" .
P.B.: "Depende de ti. Solo una cosa más: Será mejor que se lo digas a Edie".

Sin embargo, no es suficiente con esa conversación. Terry intenta tomarse la justicia por su mano usando la fuerza, por lo que de nuevo el sacerdote tiene que convencer en la barra de un bar a Terry para que en lugar de usar la violencia sea valiente y testifique:

Padre Barry (a Terry) "Un matón. Mira lo que estás haciendo. ¿Quieres ser valiente? Disparar plomo al cuerpo de otro hombre no es ser valiente. Cualquier matón que adquiere un 45 en una casa de empeño puede ser así de valiente. ¿Quieres herir a Johnny Friendly? ¿Quieres arruinarlo por lo que le hizo a Charley y a una docena de hombres que eran mejores que Charley? No luches contra él como un matón aquí en la jungla. Eso es justo lo que quiere. Te golpeará en la cabeza y alegará defensa propia. Enfréntate a él mañana en la sala del tribunal, con la verdad tal como la conoces, la verdad es tu arma, tira esa pistola y di la verdad, un arma mucho más peligrosa que esta pistola de casquillos. Eso es, si tienes las agallas. Si no las tienes, será mejor que te quedes con esto. (le ofrece el arma a Terry)

El desenlace es una mezcla de fuerza, violencia, coraje y valentía. Tras una pelea casi a vida o muerte ente Terry y Johny, todos se quedan admirados de lo que Terry ha hecho, pero esperan que de un paso más y se presente a las puertas del trabajo para confiar en él y seguirlo como líder. De nuevo la intervención del sacerdote es clave para ello:

Padre Barry: "¿Qué pasó? ¿Qué sucedió?" 
Edie: "Tommy, ¿Qué pasó?" 
Pop: "¿Adónde vas?"
E.: "Déjame pasar". 
Johny: "¿Lo quieres? Puedes tenerlo. La ratita es tuya". 
P.B.: "Traed un poco de agua fresca". 
E.: ¿Terry...?" 
P.B.: "Terry... Terry... ."
E.: (al padre Barry) "Están esperando a que entre". 
P.B..: "¿Has oído eso, Terry? Terry, ¿escuchaste eso? Perdiste la batalla pero tienes la oportunidad de ganar la guerra. Todo lo que tienes que hacer es caminar".
T.: ¿Caminar?" 
P. B.: "Johnny Friendly está apostando a que no te levantarás". 
E,: "¿Terry...?" 
P,B,: "Estás de pie. Puedes terminar lo que empezaste. (Terry se tambalea, muy confuso, con abundante sangre brotando de sus heridas)". 
P.B.: "¡Tú puedes!" 
T.: "¿Puedo? Está bien. Está bien..."
P.B.: "Dejadlo en paz. Quítale las manos de encima, dejadlo en paz."

Un final apoteósico que hace que toda la historia y todo el sufrimiento haya tenido sentido. A veces juzgamos las situaciones cuando estamos en medio de la "tormenta" sin tener la calma y paciencia necesarias para ver el desenlace de los problemas al final del todo. Como historia es moralizante y edificante, como película una obra de arte del Cine negro.

Por último, destacar un guiño que he percibido, el que muchos años más tarde Martin Scorsese haría en su película Sleepers donde el papel de Robert de Niro como sacerdote influyente y confidente en unos asesinos recuerda mucho a la figura del Padre Barry. Eso sí, salvando las distancias temporales, ya que la moralidad del Padre Bobby (de Niro) es bastante discutible.... Ahí lo dejo. 

lunes, 13 de febrero de 2023

El Papa Francisco: Un hombre de palabra (Pope Francis: A Man of His Word, Suiza, 2018)

Comentamos hoy el film-documental de Wim Wenders sobre el Papa Francisco. Del director teutón ya he comentado en este Blog sus films El cielo sobre Berlín (1987) y Tan lejos, tan cerca (1993). El director alemán está muy comprometido con varias causas en pro de la salvación del planeta, el ecologismo y el medioambiente, y esa perspectiva impregna de alguna manera casi todo el documental. El eslogan promocional "La esperanza es un mensaje universal" ya nos advierte que el proyecto no está concebido solo para los católicos sino enfocado en encontrar respaldo en todas las personas de buena voluntad. Los más de 8 millones de dólares recaudados en los Cines del mundo entero dan fe del interés que despierta una figura tan mediática que por los motivos que sea atrae tanto a creyentes como alejados de la fe.  

Precisamente acerca de la figura del Papa Francisco, por otro lado, ya comenté en su día el excelente film Francisco, el Padre Jorge, que abarca desde su nacimiento hasta su elección como Papa, por lo que puede ser perfectamente considerado como complementario al docufilm que hoy comentamos. 

No es fácil hacer un balance ecuánime de alguien que aún sigue vivo y cumpliendo su labor, pero sinceramente creo que el longevo y experimentado Ernst Wilhelm Wendersel cumple con creces el objetivo pretendido, dando una visión humana y humanizadora del Santo Padre, acercando su figura y divulgando su mensaje de una manera original, creativa y visualmente muy atractiva. 

El hilo conductor de muchos de los temas tratados es la figura de San Francisco de Asís, del que se nos narran pequeños episodios en blanco y negro (una de las técnicas favoritas de Wenders) tales como su oración al crucifijo de San Damian (donde Dios le pide: "Francisco, reforma mi Iglesia"), su desprendimiento de todos los bienes materiales, su amor por la pobreza, por la comunidad, por los animales y por la Madre Naturaleza (destaca como oración El Cántico a las criaturas) así como su intento baldío por frenar las Cruzadas peregrinando desde Asís a Tierra Santa para entrevistarse con los principales mandatarios cristianos y musulmanes. San Francisco es presentado por el Papa Francisco como "el apóstol del oído" siempre más dispuesto a escuchar que a hablar: "Francisco es un oyente. Oye la voz de Dios, oye la la voz de los pobres, la voz de los enfermos y la voz de la naturaleza".

El propio Wenders hace las veces de narrador con un comienzo muy sugerente y que interpela al espectador: "El tiempo vuela", decimos, porque realmente no entendemos lo que el tiempo es. Los días pasan, estaciones, años, siglos; somos jóvenes, envejecemos, morimos. Todos estamos sujetos al tiempo, pero no tenemos control sobre él. Tenemos menos control de lo que nos gustaría pensar. Además: Terremotos, inundaciones, los huracanes nos azotan, pero aun peor que esos desastres naturales son los hechos a nosotros mismos: guerras, hambrunas, violencia, terrorismo, catástrofes nucleares. 150 especies se extinguen todos los días como resultado de nuestras acciones. En un par de generaciones, miles de tipos de plantas, pájaros, peces e insectos se extinguirán... para siempre. Pronto seremos 7-8 mil millones de personas en nuestro planeta, más de mil millones de ellos hambrientos. Hay formas de levantarlos de la pobreza, solo... que esto no está sucediendo. ¿Entonces, qué podemos hacer?, ¿Cómo debemos vivir... hoy?, ¿Cómo podemos vivir en paz, juntos, con nuestro planeta?"

A raíz de ahí se establece la comparación entre Francisco de Asís (un revolucionario de su época) y Jorge Mario Bergoglio, el primer para americano, el primer papa del hemisferio sur, el primer papa jesuita, pero también el primer para en escoger el nombre de Francisco, cuya presentación en el balcón de la Plaza de San Pedro es también resaltada: "“Hermanos y hermanas, ¡buenas noches! Sabéis que el deber del cónclave era dar un obispo a Roma. Parece que mis hermanos cardenales han ido a buscarlo casi al fin del mundo… Pero estamos aquí".

A partir de ahí las imágenes y las palabras del Papa se van sucediendo. Algunas escenas son conmovedoras mientras que la mayoría de las frases son para enmarcar, para llevarlas a la oración y la meditación. Es un hombre que no deja indiferente a nadie, que ha puesto en pie a los miembros de la ONU, del Congreso de los EE.UU. o a los devotos de las JMJ de la misma manera, hablando desde el corazón y no con palabras de cumplimiento (cumplo y miento) a las que están acostumbradas los políticos o los mass media. Un evangelizador no impositivo sino propositivo, quien con su testimonio vital está demostrando que un cambio es posible y real, como el que propuso Jesucristo, como el que realizó San Francisco o tantos otros santos de la historia. Sucesivamente vamos viendo imágenes de encuentros con políticos tan variopintos como Joe Biden, Evo Morales, Recep Tayyip Erdogan, Angela Merkel, Barack Obama, Simon Peres, Vladimir Putin, Donald Trump... científicos como Stephen Hawking o todo tipo de personalidades religiosas de primer nivel. 

Algunas frases que me gustaría destacar según la temática son las siguientes:

A los cardenales de la Curia romana: "El mundo de hoy es mayoritariamente sordo. Y creo que entre nosotros, los sacerdotes, hay muchos sordos. Estoy hablando de conseguir involucrarnos en la vida de las personas..."

Entrevista de un niño: "P: "¿Por qué quiso ser Papa?" R: "Alguien que tiene el deseo de convertirse en Papa, no se gusta a sí mismo. Y Dios no lo bendice. No, nunca quise convertirme Papa"

Sobre la pobreza: "Bien, yo creo esto. Nuestros tiempos nos hablan de tanta pobreza en todo el mundo, ¡y eso es un escándalo! En un mundo donde tenemos tales riquezas, tantos recursos para dar de comer a todos... no se puede entender como puede haber tantos niños hambrientos, tantos niños sin educación, tantos pobres! ¡La pobreza hoy es un ultraje! Todos debemos considerar si no podemos convertirnos un poco más pobres." .... "Cómo me gustaría una Iglesia pobre para los pobres. Jesús nos dice en el Evangelio que nadie puede servir a dos maestros, o servimos a Dios o servimos al dinero".... "Mientras haya una Iglesia que pone su esperanza en la riqueza, Jesús no está ahí".

Sobre el desempleo: "Pensemos que entre los jóvenes de 25 o menos más del 40% no tiene trabajo. ¿Qué hacen los jóvenes sin empleo?, ¿Qué futuro tienen?, ¿Qué camino de vida siguen? ¿Qué escogen? ¡Esto es serio! Cuando no te ganas el pan, ¡Pierdes tu dignidad! Esta falta de trabajo...Esta falta de trabajo... nos roba la dignidad!". Me gusta hablar de las tres T: 'trabajo' ,'tierra' y 'techo'."

Pobreza en Sudamérica: "En un mundo donde hay tantos campesinos sin tierra, tantas familias sin hogar tantos trabajadores sin derechos, tanta gente... ¿De quién es la dignidad lesionada? Nos damos cuentaque las cosas no van bien, cuando el suelo, el agua y el aire y todos los seres vivos de la creación están bajo amenaza permanente".. "¡Esta economía mata! Esta economía excluye. Esta economía destruye a la Madre Tierra... Alrededor del 80% de las riquezas del mundo están en las manos de menos del 20% de la humanidad. Hay una desigualdad en el equilibrio económico".

Encíclica "Laudato sí" y el Medioambiente: "Estos fenómenos corresponden a la actualidad generalizada y creciendo en silencio de la 'cultura del desecho'. Es una lástima para todos y cada uno de nosotros ¡Y todos somos responsables! Nadie puede decir: "No tengo nada que ver con esto." Todos somos responsables" 

Presos y el perdón: "¿Sabéis quien fue declarado el primer santo en la Iglesia? Un prisionero. Fue condenado a muerte junto a Cristo, quien le dijo: "Hoy estarás conmigo ¡en el cielo!". La sociedad debe aprender de este ejemplo de Cristo. Todos necesitamos recibir perdón".

La familia y la necesidad del descanso: "El sábado descansas. Un día de la semana, ¡es lo mínimo! Por gratitud, para adorar a Dios. Para pasar el tiempo con la familia, para jugar, para hacer todas estas cosas. ¡No somos máquinas!"

Homosexualidad: "¿Cómo pretende Su Santidad afrontar la cuestión del lobby gay? Si una persona es homosexual, y está buscando al Señor, y tiene buena voluntad entonces, ¿Quién soy yo para juzgarlo? Debemos ser hermanos cada uno del otro...El Catecismo de la Iglesia Católica explica esto maravillosamente. Dice: nadie debe ser marginado por esto, deben estar integrados en la sociedad"

Ideologías de género: "Obviamente, el machismo y los movimientos feministas no son de ayuda porque son movimientos que aislan. Los movimientos útiles son aquellos establecidos en reciprocidad y enfoques complementarios. ¡Tenemos que integrar a las mujeres! Porque un mundo sin el liderazgo, los consejos y la visión de la mujer no puede avanzar."

Pederastia en la Iglesia: "El abuso de menores es una ofensa tan brutal, tan... Sabemos que es un serio problema en todas partes, pero me preocupa en la ¡Iglesia!. Un sacerdote que hace esto traiciona el cuerpo del Señor! La Iglesia no puede permanecer indiferente a esto. Con la pedofilia, ¡tolerancia cero! porque es un crimen, no, ¡peor!: Los estás dejando con vida, pero destruido".

Sobre la muerte: "A veces, evitamos pensar en nuestra propia muerte y vivir como si nunca vamos a morir. Y esto es peligroso, ya que no conduce a la sabiduría. Es muy sabio reconciliarnos con el hecho de que vamos a morir. Entonces, ¿Cómo pienso en mi propia muerte? Sé que a través de las pequeñas muertes de cada día, un día... me iré. ¿Cuándo? Cuando el Señor quiera, como Él quiera. Pero... no soy eterno. Nadie lo es, solo Dios".

El sufrimiento: "¿Por qué sufren los inocentes? O la gran pregunta que el gran Dostoievski se hizo: "¿Por qué sufren los niños?" Es una pregunta que todos nos hacemos. Y si me preguntas porqué niños inocentes tienen que sufrir, lo único que puedo decir es: "Mira al Hijo de Dios en una cruz". No sé que otra respuesta dar.... Dios es respetuoso de la libertad. Permitió que su hijo muriera en la cruz."

El holocausto y los "holocaustos" actuales de refugiados.... "Danos la gracia de estar avergonzados de lo que pudimos hacer como seres humanos ¡Nunca más, Señor! Nunca más. Tenemos que estar en guardia contra el peligro de la 'globalización de la indiferencia', que nos lleva a ir poco a poco a normalizar el sufrimiento de los demás. Siempre he dicho que construir muros no es una solución. Hemos visto en el ultimo siglo la caída de uno... ¡No, no resuelve nada! Debemos construir puentes, puentes que se hacen inteligentemente, con diálogo e integración".

Ecumenismo e interrreligiosidad: "¿Tú crees que Mahatma Gandhi o Martin Luther King son menos amados por Dios que un cura o una monja? Dios ama y nos ve a todos con su corazón. Y tal vez ese es el único lazo común que todos los hombres tienen, el vínculo del amor de Dios".

La belleza: "Si tú me dices: Dame un ejemplo de belleza sencilla cotidiana con el que podemos ayudar a otros a sentirse mejor y ser feliz. Se me ocurren dos cosas. Una sonrisa, y el sentido del humor. ¡La capacidad de sonreír! Una sonrisa es la flor del corazón, especialmente cuando se da libremente. Aquí voy a hacer una confesión personal. Cada día, después de mi oración de la mañana, recito a Santo Tomás Moro, su "Oración por el buen humor. Comienza de una manera que te hace reír: "Dame, oh Señor, una buena digestión, pero también algo para digerir...".

Así puestas una detrás de otra pueden saturar. Son casi materia para unos ejercicios espirituales. Todo ello aderezado con imágenes bellas y veraces, nada de postureo fácil y barato. Abrazos, besos, caricias a enfermos, presos, ancianos...Un par de lavatorio de pies del Jueves Santo a presos y refugiados, acompañado de un testimonio de pobreza y solidaridad que arrastra a las masas. Un último apunte, preciosa también la B.S.O. de Laurent Petitgand, especialmente para nosotros -los latinos- la canción Solo le pido a Dios, toda una oración a Dios al tiempo que un grito de rebeldía contra un mundo injusto e insolidario. Altamente recomendable su visionado, si puede ser de manera reposada y repetidas veces mucho mejor...

lunes, 6 de febrero de 2023

La Señora de Fátima (España, 1951)

Comentamos hoy una película que fue un auténtico clásico del Cine Religioso español acerca de las apariciones de la Virgen de Fátima en Portugal. Hija de su época, predomina el proselitismo y la apologética propias del nacional-catolicismo imperante en el régimen de Franco, lo que no es óbice para que el film sea muy interesante y tenga una calidad elevada para la época. 

Dirigida por el experimentado Rafael Gil (desde 1938 ya había dirigido su primera película de las 69 que realizó, muchas de ellas con contenido religioso), el reparto cuenta también con actores de primera fila como Tito Junco, Rafael Bardem o Fernando Rey. En el caso de los niños protagonistas de las apariciones también son buenas las interpretaciones de Inés Orsini, María Dulce y Eugenio Domingo, aunque paradójicamente para la primera de ellas (Lucía, la protagonista principal) supusiera su último largometraje. Ello tiene mucho mérito, ya que nunca es fácil hacer una película protagonizada por niños, menos aún en aquellos años en los que repetir escenas era un lujo prohibitivo. 

El argumento recrea las apariciones en 1917 de la Virgen de Fátima en la Cova de Iría, un lugar insignificante cercano a la pequeña población que diera nombre a las apariciones. En plena Primera Guerra Mundial, Europa sufría un periodo convulso, del que no escapó Portugal, donde la persecución religiosa se había instaurado desde hacía unos años por los regímenes de izquierda. Se ha impuesto un marxismo por la fuerza, representado en el film por el alcalde de Ourem, Oliveira

Desde el principio se percibe un ambiente familiar religioso en casa de Lucía (Rezar antes de comer, en la cama antes de dormir...), pero no exento de problemas. El hermano mayor, Manuel, se tiene que ir a la guerra. El padre, Antonio, tiene que vender parte de las tierras heredadas para tener un sustento. 

La primera oración que aparece la realiza Lucía antes de dormir: "Señora vuelve tus ojos a esta casa. . No te olvides de los que sufren. Dios te salve, María… Iglesia: Tú eres nuestra única esperanza y nuestro único consuelo"

La acción de las apariciones comienza (no podía ser de otra manera el 13 de mayo. Los niños están cuidando las ovejas, y cuando se disponen a rezar el Rosario ven una luz muy fuerte. Comienzan a rezar y escuchan una voz de mujer que mantiene este diálogo con ellos:

Virgen: "No temáis, no os haré ningún daño".
Lucía: "¿Que queréis de nosotros?"
V.: "Quiero que vengáis durante seis meses los días 13 a esta misma hora. En octubre os diré quién soy y para qué os he llamado. ¿Estáis dispuestos a soportar los sufrimientos que Dios quiere mandaros en reparación de los que le ofenden?"
Niños: "Si queremos".
V.: "Sufriréis mucho, pero la gracia de Dios os confortará. Rezad todos los días por la Paz y la salvación del mundo… Yo estaré siempre a vuestro lado".

Evidentemente nadie en la familia los cree al principio, y el cura del pueblo lo achaca a que han leído la historia de Bernadette (Aparición en Lourdes, Francia), la aparición de Guadalupe (México) o incluso a cosas del diablo. Ello genera las burlas de los vecinos e incluso algunos azotes por inventar historias. No obstante, hay un cierto revuelo en el pueblo y el gobernador envía a Don Lorenzo a investigar. un funcionario cuya mujer (Elena) está inválida en una silla de ruedas.

El 13 de junio (San Antonio, patrón del pueblo). Los niños se escapan de nuevo a la Cova para mantener otra conversación con la Virgen:

Lucía: "Díganos lo que quiere".
Virgen: "Seguir viviendo todos los meses este mismo día. Se lo que habéis sufrido y lo que sufriréis aún. Pero no temáis ya. En octubre haré un gran milagro para que todos crean".
L.: "¿Qué manda de nosotros?"
V.: "Escucha lo que se refiere a ti, porque tus primos vendrán pronto conmigo. Tu permanecerás aquí abajo más tiempo. Quiero que aprendas a escribir para que puedas dar testimonio de mi mensaje".
L.: "Entonces, ¿debo quedarme sola frente a todos?"
V.: "Ten ánimo, yo no te abandonaré jamás.Este es mi mensaje: la guerra que padece el mundo acabará pronto, pero si los hombres no cambian, dentro de poco tiempo empezará otra más horrible, varias naciones serán aniquiladas, los buenos sufrirán persecución porque Rusia esparcirá sus errores por el mundo, provocando atropellos contra la Iglesia y su Pontífice. Quiero para evitar esto, que los hombres vuelvan sus ojos hacia mi. Si lo hacen, Rusia se convertirá y habrá paz. Este es el mensaje que te confío. Guárdalo en secreto hasta que yo disponga".

A partir de ahí comienza una transformación interior de los niños, con sacrificios corporales, oración y penitencias. La gente comienza a llevarles enfermos para que los curen, mientras que el alcalde los detiene e interroga. Los amenaza con quemarlos, los engaña... pero nada los hace retractarse. Curioso que los niños hubieran aguantado tanto si la historia fuera inventada. Los sacerdotes pasan de la prudencia inicial a dimitir de sus cargos por creer a los niños y no enfrentar al gobierno y la jerarquía, aún suspicaz ante el caso. 

Se llega así al clímax del 13 octubre, donde se anuncia un milagro y miles de fieles acuden en peregrinación al lugar. Entre cantos de "Sálvame, Virgen María" y Rosarios en latín se produce el milagro del sol, la curación de muchos enfermos (entre ellos un ciego y Elena, la mujer del funcionario) y el último diálogo entre la Virgen y los niños:

L.: "Hablad, Señora"
V.: "Yo soy la Virgen del Rosario. Diles que construyan aquí un templo en mi honor y que no agravien a Dios, a quien tienen muy ofendido"
L.: "Quiero pediros muchas cosas, la curación de unas personas, la conversión de otras".
V.: "Algunas se han curado ya, otros curarán también, pero es preciso que todos enmienden sus vidas, si quieren que el Señor siga favoreciéndoles".
Niños: "Dios te salve, María…".

La película termina con el famoso canto "El 13 de mayo, la virgen María..." e imágenes reales de la época de la Basílica y las peregrinaciones.

Conociendo la historia, he localizado algunos fallos en la manera de contarla, como que no aparece el ángel que precede a las apariciones de la Virgen o que los tres niños parecen que tienen la misma edad, cuando en realidad Francisco era muy pequeño. El milagro del sol (recogido en los periódicos de la época) también habla de movimientos circulares, diverso a lo que se ve en el film. Quitando estos elementos y algunos más, es bastante fiel a los relatos de Lucía, la más longeva de los tres quien en varias ocasiones dejó su testimonio escrito. 

La aparición a estos tres humildes niños pastores (LucíaJacinta Francisco), aún es a día de hoy objeto de controversia. La Iglesia Católica nunca reconoce de facto una aparición como revelaciones auténticas, pero sí como revelaciones privadas con indicios de veracidad. El testimonio de los Papas que acuden a lugares referentes en este campo suele ser una aprobación implícita de la veracidad de lo ocurrido. Queda a juicio de la persona, creyente, agnóstico o ateo, da igual, el considerarla verdadera o no, y ver en su mensaje una llamada a la conversión y al cambio de vida, que, por otra parte, es un elemento fundamental del Evangelio