lunes, 24 de marzo de 2025

Mira, Señor, nuestras penitencias: Baruc

El Libro de Baruc es un texto profético de solo 5 capítulos con un esquema muy definido: Oración penitencial - Elogio de la Sabiduría - Esperanza de una restauración. Existe un capítulo 6 que nada tiene que ver con este autor, llamado "Carta de Jeremías" y que muchos autores consideran un libro bíblico independiente (lo que elevaría el número de libros de A.T. a 47). 

Al leerlo en este periodo cuaresmal en el que estamos inmersos, la parte que más me ha llamado la atención ha sido la primera, pues se trata de todo un "Manual teórico de penitencia". Dios está enfadado con el Pueblo de Israel por sus múltiples pecados y la consecuencia de ello es el destierro en Babilonia. El texto indica que es necesaria la práctica penitencial de los justos para revertir esta situación y esperar a que lleguen tiempos mejores.

El texto sagrado, espiritualmente, no tiene desperdicio; si bien las correlaciones pecado-castigo inmediato de Dios y Penitencia-cambio del status quo son más que discutibles, pues la experiencia cotidiana nos hace comprobar que a "los malos" les va bien en la vida mientras que el padecimiento de "los justos" a veces parece no tener fin. El Libro de Job será la respuesta a esta aparente incoherencia teología, por lo que su lectura es complementaria y casi imprescindible para un mayor entendimiento del sufrimiento del justo. 

Como digo, y dentro del ambiente penitencial de estos días cuaresmales, me han conmovido especialmente dos versículos que son los que hoy quiero compartir con vosotros:

Baruc 2, 17-18:

"Abre, Señor, tus ojos y mira que no son los muertos que yacen en el abismo, y cuyos cuerpos han quedado sin vida, los que te dan gloria y reconocen tu justicia. Son los que viven agobiados por la tristeza, los que caminan encorvados y extenuados, los de ojos lánguidos y estómago hambriento... esos son los que te dan gloria y reconocen tu justicia, Señor".




lunes, 17 de marzo de 2025

El libro de Eli (The Book of Eli, EEUU, 2010)

Comentamos hoy una película cuyo género es difícil de catalogar por ser la suma de muchos de ellos. Tiene un poco de ciencia ficción, western, aventuras, thriller, futurista, distópica, algo de artes marciales tipo manga, luchas que recuerdan a Matrix... y por si ello fuera poco toca temas religiosos como la fe, el Apocalipsis, estando además plagada de citas y referencias bíblicas. Se trata de la quinta película dirigida por los hermanos Hugues (hasta la fecha han hecho 6) y se puede considerar también un duelo interpretativo entre Denzel WashingtonGary Oldman. Promocionada con el eslogan "Algunos matarán para tenerlo. Él matará para protegerlo" recaudó en total 160 millones de dólares, doblando así en beneficio un presupuesto de 80 millones.

Vamos con el argumento. Los primeros 8 minutos destacan por la ausencia de títulos de crédito y de diálogos. Solo presenciamos un ambiente sórdido, oscuro y algunos sonidos que sitúan al espectador en la trama. Eli (Washington) lleva 30 años atravesando a pie los Estados Unidos de América portando el libro al que hace referencia el eslogan. Se dirige enigmáticamente "al Oeste", sin comida, sin agua... y sin explicar porqué ni para qué. Por el camino encuentra asaltadores de carreteras, asesinos, violadores, caníbales... hasta llegar a un pueblo enigmático gobernado por Carnegie (Oldman), quien desde un primer momento muestra interés en la búsqueda de un libro, rodeado de forajidos que no saben leer ni escribir pero ejecutan todas sus órdenes. Ayudado por Solara (Mila Kunis), Eli intentará hacer que el misterioso libro no caiga en poder de Carnegie y cumplir su misión de llevarlo a un lugar seguro.

El final (no voy a ser de momento spoiler) es muy sorprendente y da sentido a toda la película, produciendo un efecto similar al de El Sexto Sentido, en el que el espectador tiene que repasar mentalmente todo lo sucedido a lo largo del film. Solo por ello merecería la pena verla. Pero es que además, religiosamente, no tiene desperdicio. Vamos con el análisis del mismo.

Todo comienza con el nombre del protagonista, ya que aquí nada es aleatorio. Eli es una abreviatura del nombre hebreo Eliyahu, que significa "mi Dios es Yahweh". En arameo Eli es directamente el nombre de Dios, como reza Cristo en la cruz “Elí, Elí, ¿lama sabactani? (Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?)".

En la primera escena con diálogos de la película, cuando Eli sale de un túnel y encuentra a unos forajidos, encima de su cabeza hay una inscripción con los números 14,6. "Casualmente" en esa cita del Apocalipsis se puede leer: "Vi otro ángel que volaba por medio del cielo y tenía una Buena Noticia eterna que anunciar a los habitantes de la tierra, a toda nación, raza, lengua y pueblo"

Además de este guiño, a lo largo de la película se citan concretamente cuatro partes de la Biblia:

Génesis 3:18-19: "Espinas y cardos te dará, mientras le pides las hortalizas que comes. Con el sudor de tu frente comerás tu pan hasta que vuelvas a la tierra, pues de ella fuiste sacado. Recuerda que eres polvo y al polvo volverás."

Salmo 23: "El Señor es mi pastor, nada me falta: en verdes praderas me hace reposar, me conduce hacia las aguas del remanso, y conforta mi alma; me guía por los senderos de justicia, por amor a su nombre; aunque vaya por un valle tenebroso, no tengo miedo a nada, porque tú estás conmigo, tu voz y tu cayado me sostienen..."

Eli: Escribe todo exactamente como lo digo. El primer libro de Moisés, llamado Génesis. Capítulo 1, versículo 1. "En el principio, Dios creó los cielos y la tierra".
Versículo 2. "Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo. Y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas".
Versículo 3. "Y dijo Dios: Sea la luz. Y fue la luz".

2 Timoteo 4,7: "He combatido el buen combate, he concluido mi carrera, he conservado la fe"

Otro aspecto interesante son las bendiciones de las comidas, algo desgraciadamente en desuso en nuestros días. Eli realiza una y Solara otra: 

Eli: "Gracias Señor por una cama cálida para dormir, gracias por la comida que estamos a punto de comer, gracias por un techo sobre nuestras cabezas en noches frías como esta, gracias por la compañía en tiempos difíciles como estos, Amén".

Solara: "Te agradecemos nuestra comida. Gracias por mi madre. Gracias por el techo que nos das y por nuestros nuevos amigos. Y... bueno, supongo que eso es todo por ahora".
Carnegie: "Amén. Esa es la palabra que estás buscando, Amén.

Dentro de este análisis, los diálogos interesantes, que también los hay y muy buenos. Yo he rescatado cinco, el primero de ellos incluso con un toque de humor, ya que en este caso no se cita a la Biblia sino a Johny Cash, "El Rey de la música Country":

Solara: "Bueno, ¿cómo sabes que vas por buen camino?"
Eli: "Camino por la fe, no por la vista".
Solara: "¿Qué significa eso?"
Eli: "Significa que sabes algo aunque no lo sepas".
Solara: "Eso no tiene sentido".
Eli: "No tiene porqué tener sentido. Es fe, es fe. Es la flor de luz en el campo de oscuridad que me da la fuerza para seguir adelante. ¿Entiendes?"
Solara: "¿Es de tu libro?"
Eli: "No, es... Johnny Cash, en Live at Folsom Prison".

La segunda cita es de Carnegie, acerca de la Biblia. Desgraciadamente, a lo largo de la historia, este Libro Sagrado -al igual que otros- ha sido un elemento que ha incitado al odio, la violencia y la manipulación de personas de mentalidad débil. Algo que no debería haber ocurrido pero que el protagonista deja bien claro: 

Carnegie: "¡No es solo un puto libro! ¡Es un arma! Un arma dirigida directamente a los corazones y las mentes de los débiles y desesperados. Nos dará el control sobre ellos. Si queremos gobernar más de un jodido pueblucho, tenemos que tenerlo. Vendrá gente de todas partes; harán exactamente lo que les diga si las palabras son del libro. Ha pasado antes y volverá a pasar. Solo necesitamos ese libro".

La tercera cita es de Eli. En una conversación con Solara, le cuenta cómo era la vida antes de "El gran resplandor". No tiene desperdicio, porque tras gran parte de la película en la que el espectador visualiza las penurias de una sociedad apocalíptica donde todo escasea menos el odio, es difícil no sentirse profundamente interpelado para valorar lo que en el momento presente tenemos y no disfrutamos:

Eli: "La gente tenía más de lo que necesitaba. No teníamos ni idea de qué era valioso y qué no. Desechábamos cosas por las que ahora la gente se mata".

El cuarto diálogo también es para reflexionar, además que sirve para justificar -en parte- las acciones violentas de Elí. Al espectador creyente le puede llamar la atención que un hombre de Dios ande matando a gente a diestro y siniestro. Parece que no casan las conductas de Eli con el contenido del libro que defiende, al menos del Nuevo Testamento y del mensaje de paz y perdón de Jesucristo. En este diálogo se aclara algo de ello:

Solara: "No pensé que alguna vez renunciarías al libro, pensé que era demasiado importante para ti".
Eli: "Lo era. Lo llevaba y lo leía todos los días, me obsesioné tanto con protegerlo que olvidé vivir según lo que había aprendido de él".
Solara: "¿Y qué es eso?"
Eli: "Hacer más por los demás que por ti mismo".

El último fragmento que he escogido es el final de la película. Es la despedida del protagonista en una carta espiritual a Dios que no tiene desperdicio y que termina con la frase de San Pablo en su Carta a Timoteo ya mencionada anteriormente:

Eli: "Querido Señor, gracias por darme la fuerza y ​​la convicción para completar la tarea que me encomendaste. Gracias por guiarme con rectitud y veracidad a través de los muchos obstáculos en mi camino. Y por mantenerme firme cuando todo a mi alrededor parecía perdido. Gracias por tu protección y tus muchas señales en el camino. Gracias por cualquier bien que haya podido hacer, lamento mucho lo malo. Gracias por la amiga que hice. Por favor, cuídala como cuidaste de mí. Gracias por finalmente permitirme descansar. Estoy muy cansado, pero ahora voy a descansar en paz. Sabiendo que he hecho bien en mi tiempo en esta tierra. Peleé la buena batalla, terminé la carrera, mantuve la fe".

Una película interesante, profunda y espiritualmente provechosa. De las que te hacen pensar sobre ellas los días posteriores a su visionado... De las que me gustan